Esa pregunta la lanzo a raiz de lo que pasó con el Gran Poder de Sevilla, por lo que pasó ayer en la Capilla del Hospital y por lo que sucede día a día en las ciudades y pueblos de toda España en los que nuestras Iglesias son muros en los que se escriben amenazas y nuestras imágenes son juguetes para aquellas personas que piensan que no tienen ningún valor.
Esto pasa habitualmente aunque nosotros no nos demos cuenta. Hablando con cofrades de muchas ciudades, me han contado (entre otras cosas) que en Málaga suelen pasar cosas parecidas, como tirarle a las imágenes latas de coca-cola, o colgar banderas con significado satánico en edificios anexos de las casas hermandades cuando las cofradías salen a la calle en Semana Santa, o escuchar humillaciones e insultos a las imagenes durante la Estación de Penitencia y un muy largo etcétera.
Y ahora yo me pregunto lo siguiente:
¿Están nuestras imágenes protegidas?
¿Ustedes que piensan? Pueden votar en la encuesta que tienen en la parte superior derecha de la página.
Desde aquí queremos mandar todo nuestro apoyo a la Hermandad del Rosario del Mar, así como a sus hermanos y fieles.
Un saludo.
PD: Yo también tengo miedo, de que esto se nos vaya de las manos.
1 comentario:
Yo diría que están todo lo protegidas que pueden estar. No podemos poner vigilancia las 24 horas del día junto a nuestras iglesias y casas de hermandad. Tampoco podemos proteger nuestras imágenes con cristal ignífugo y antibalas como creo que es el caso del Cachorro en Sevilla.
Y si a ello le unimos que con ocasión de un Besamanos o un Besapiés nuestras imágenes bajan a ras de suelo parece difícil evitar que ocurran estas cosas.
Al final parece que lo único que queda es rezar para que no ocurran estas cosas, arreglarlas cuando ocurran y de algún modo resignarse ante aquellos actos que terminan quedando impunes.
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